Redacción BANCA. 11 junio 2025. El Banco Mundial recortó el pasado martes su previsión de crecimiento mundial para este año, de el 2.7% que había previsto, al 2.3%, advirtiendo al mismo tiempo, que la década de 2020 va camino de convertirse en la década de menor crecimiento desde 1960.
La entidad multilateral señala como factores determinanrtes de esta situación, las tensiones comerciales y la incertidumbre política, entre otros.
También advirtió -basándose en sus previsiones actuales- que el crecimiento mundial en los primeros siete años de esta década va camino de alcanzar una media del 2,5%, la más lenta para cualquier década desde los años sesenta.
“La economía mundial se encuentra hoy de nuevo en medio de turbulencias. Sin una rápida corrección del rumbo, el daño a los niveles de vida podría ser profundo”, ha indicado Indermit Gill, economista jefe del Banco Mundial, en un prólogo al informe.
“La discordia internacional -sobre el comercio, en particular- ha puesto patas arriba muchas de las certezas políticas que ayudaron a reducir la pobreza extrema y a expandir la prosperidad tras el final de la II Guerra Mundial”.
La institución señaló que las perspectivas mundiales mejorarían si las tensiones comerciales remitieran y si los gobiernos frenaran el endeudamiento y se centraran en la creación de empleo.
El Banco Mundial rebajó las previsiones de crecimiento para casi el 70% de todas las economías en su último informe Perspectivas Económicas Mundiales.
Este año se espera un crecimiento más lento en casi el 60% de todas las economías en desarrollo, lo que supone una rebaja de 0,3 puntos porcentuales respecto a la previsión de enero. Se prevé que los países de renta baja crezcan un 5,3% este año, lo que supone una rebaja de 0,4 puntos porcentuales.
Estados Unidos crecerá un 1,4% este año, unos 0,9 puntos menos, mientras que la previsión de China se mantiene sin cambios en el 4,5%. Se prevé que tanto la zona euro como Japón crezcan un 0,7%, lo que supone una rebaja de 0,3 puntos y 0,5 puntos, respectivamente.
“El crecimiento podría resultar menor si se intensifican las restricciones comerciales o si persiste la incertidumbre política, lo que también podría dar lugar a una acumulación de tensiones financieras”, advirtió en el informe. Otros riesgos son los efectos indirectos de un crecimiento más débil en las principales economías, el agravamiento de los conflictos y los fenómenos meteorológicos extremos.