Que extraño que un presidente cambie a la cabeza del Banco de Reservas, cuando, de acuerdo a los datos publicados, esa entidad bancaria está teniendo su mejor momento, y Samuel Pereyra es uno de los funcionarios mejor ponderado. Y no sólo eso, sino que lo envían a una dependencia de menor categoría. La pregunta se cae de la mata….Qué pasó ahí?